Pastor, sé que no debería preocuparme, pero estoy un poco preocupado por algo. (me decia un hermano de la congregación ). Quizá es debido a una nueva situación en nuestra familia. Como veo, yo no puedo ayudar pero tengo un poco de ansiedad. Mire, mi esposa y yo recientemente averiguamos que íbamos a ser abuelos. Esto me ha llevado a pensar en el tipo de mundo en que nuestro nieto crecerá. Cuando él o ella se gradúen de la escuela secundaria, será en el 2025. ¿Cuál será el costo de la colegiatura del Colegio para entonces? ¿Si todavía hay combustibles, la gasolina costará $ 50 un litro? ¿La moral y la ética serán anticuadas? ¿Y la iglesia todavía tendrá impacto?
El futuro puede ser un lugar de miedo. Lo desconocido puede ser abrumador, especialmente cuando el presente conocido tiene tantas luchas. Es por eso que necesitamos confiar en lo que Dios ha prometido. No importa a qué situación se enfrentarán nuestros nietos, pueden confiar en la promesa de Dios de ayuda, independientemente de qué problemas haya en el mundo. Dios dice, "no te dejare ni te desamparare" (Heb 13: 5 Jos. 1:5). Y Jesús dijo, "y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo." (Mateo 28:20). Estos son grandes promesas en que confiar cuando empezamos a preocuparnos por el futuro, ya sea nuestra o la próxima generación.
No podemos saber de lo que depara el futuro, pero podemos confiar en aquel que nos da la vida.
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